«Para no acabar haciendo el necio, prefiero no empezar haciendo el listo»
William de Baskerville («El nombre de la Rosa»)
«[…] sin embargo, imaginando órdenes falsos habéis encontrado algo…»
Adso de Melk («El nombre de la Rosa»)

sábado, 11 de diciembre de 2010

escribir es escuchar... las dimisiones creativas del lenguaje

No escribo para que me entiendan,
no me considero tan importante y relevante para tener semejante pretensión...
escribo porque hay algo que dentro y fuera de mí (que de momento no acierto a llamar de otro modo, pues no estoy seguro si existe un dentro y fuera, y ni siquiera si existe ese "de mí") lucha por ser dicho y así yo lo entienda,
a eso sí, por favor, préstenle atención

2 comentarios:

  1. MUDO


    Soy un complicado mudo,
    lleno de letras, palabras y signos que no se entienden,
    que no dicen nada de lo que quiero decir.
    No me basta mi intensión, no me basta mi mensaje
    estoy atado a lo que me quieran entender los otros.

    Quiero expresarme y además
    quiero sentirme comprendido,
    pero no como ellos sino como yo.
    Temo porque su concepto de mi no soy yo…

    Vivo constantemente entre
    la esperanza de ser entendido y el desacierto de sus conceptos.
    ¿cómo saber que se me comprende?
    ¿cómo cerciorarme de la certeza de lo que piensan de mi?

    He intentado expresarme y me excluyen sus caprichos,
    soy en el otro lo que se ha aferrado a hacer de mí
    y se vuelve inútil mi esfuerzo por revelarme.

    En mi lucha por gestarme me paren con gran premura,
    se da muy rápido el paso, siempre condicionante,
    a concebirme como ellos, interpretando desde ellos.

    Ese soy yo para ellos.
    Yo soy ellos y aun se molestan con mi incongruencia, su incongruencia.
    Ya mi lenguaje no expresa, no comunica y eso me frustra,
    me enferma, me deshumaniza, me destruye.

    Prefiero callar, ya son inútiles mis esfuerzos,
    estoy demasiado expuesto, no soportaré más una falsa interpretación.
    Dejaré que la profundidad del silencio les diga quien soy,
    quien seré,
    sí, lo inefable se los dirá.

    SAPA

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  2. las dimisiones del lenguaje son creativas, dan lugar a algo... por eso crean.
    Y sin embargo, ¿realmente lo que quiero decir soy yo? ¿está en mis manos decirlo, o más aun, expresar-me?
    citando a Blanchot: se necesitan dos hablas para decir una misma cosa, ¿por qué? porque quien la dice es siempre el otro

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